Los principales componentes de un dispositivo móvil NFC son: el chip NFC, una bobina o antena incorporada en el interior del teléfono, y la tarjeta SIM como elemento seguro. Además, es imprescindible que la batería del dispositivo sea compatible NFC.
El estándar NFC incluye la capa de aplicaciones NFC, donde la seguridad es un elemento fundamental, aplicada a casos de uso especialmente sensibles como por ejemplo los medios de pago sin contacto.
Respecto al software del dispositivo móvil, consiste en una serie de aplicaciones denominadas MIDlets que son descargadas en la memoria del smartphone NFC mediante el protocolo OTA (Over-The-Air), y las mismas incluyen soporte para servicios de medios de pago, programas de fidelización a clientes, abonos de transporte público, etc…
Estas apps a su vez, interactúan con las aplicaciones NFC del elemento seguro (tarjeta SIM) dando como resultado los servicios NFC